La llegada de un o una bebé a casa conduce a que los padres se sensibilicen en tomar decisiones en beneficio de la salud de su hijo. Una de las más relevantes es la relacionada a la aplicación de las vacunas.
La confianza de las familias para inocularlos disminuyó de manera considerable a partir de la pandemia que atravesamos a inicio de la década, de acuerdo a datos reportados por la UNICEF en 2023, aunque también advirtió que la percepción de la importancia de las vacunas infantiles ha fluctuado dependiendo el contexto de cada país.
¿Por qué hay dudas sobre la importancia de las vacunas infantiles?
Una de las razones por las que los padres se preguntan sobre la relevancia de las vacunas en la salud de las y los niños, especialmente en la etapa de la Primera Infancia (de los 0 y los 6 años), es la incertidumbre que causa no saber cómo reaccionarán en el cuerpo; la circulación de información engañosa o el uso de la misma con fines más allá de la salud infantil.
Sin embargo, la vacunación en la Primera Infancia es sumamente importante para el fortalecimiento del sistema inmunitario de las y los niños; ya que, a pesar de que sus cuerpos puedan combatir ciertos microbios por sí solos, existen enfermedades contra las que no tienen capacidad de luchar. Por ello, las vacunas son elementales para prevenirlas y combatirlas.
¿Qué hacen las vacunas en los cuerpos?
Las vacunas están compuestas de cantidades muy pequeñas de antígenos —partes de microbios, virus, bacterias o cualquier sustancia ajena al cuerpo humano— que, al ser inyectadas en las personas, impulsan el desarrollo del sistema inmunitario y evitan que contraigan enfermedades de gravedad. Así, si la persona vacunada se expone en el futuro al microbio, su cuerpo estará preparado para responder rápidamente y de manera efectiva.
En el caso específico de los niños de los 0 a los 6 años de vida, su sistema inmunitario está en constante desarrollo, lo que les hace más vulnerables ante los miles de microbios con los que convivimos en la vida diaria. Motivo por el cual, las vacunas son necesarias en su crecimiento, para que le enseñen a defenderse contra ellos a través de la generación de anticuerpos.
Según el Centro de Enfermedades Contagiosas (CDC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, hace 30 años, las vacunas usaban 3,000 antígenos para proteger a los niños contra 8 enfermedades antes de los 2 años de vida. Hoy, se utilizan 305 antígenos para protegerlos contra 14 enfermedades antes de los 2 años. De acuerdo con la UNICEF, la vacunación:
- Salva vidas: se estima que solo las vacunas contra el sarampión impidieron la muerte de más de 21 millones de personas.
- Evita que regresen enfermedades altamente contagiosas y erradicadas en muchos países como el sarampión, la difteria y la poliomielitis.
- Promueve la “inmunidad colectiva”, que se refiere a cuando un número suficiente de personas están inmunizadas contra una enfermedad específica, evitando que se propague fácilmente de persona a persona. Con el tiempo, se vuelve menos común y, en ocasiones, llega a desaparecer completamente en esa comunidad.
¿Qué vacunas le tengo que poner a mi bebé?
En México, las autoridades de salud recomiendan que las y los bebés reciban sus primeras vacunas, contra la Hepatitis B y la tuberculosis después de haber nacido; para seguir con el esquema de vacunación de acuerdo a las siguientes fechas de su vida:
Fuentes:
-
- Gobierno de México. Programa de vacunación universal.
- Gobierno de México. Programa de vacunación universal.
- CDC. “Por qué es importante vacunar a los niños”
- NIH. Why vaccines matter: understanding the broader health, economic, and child development benefits of routine vaccination.
- UNICEF. Lo que debes saber sobre las vacunas infantiles.